Respecto a lo que queda de mi en la actualidad, aparte de mis obras, se encuentran numerosos documentos, entre los más importantes estan:
Cartas a Martín Zapater
Comenzaremos con las cartas que me escribía con mi fiel amigo Martín. Entre las numerosas que hay saco a la luz y a destacar esta del 22 de enero de 1777, que cuenta la ida de Zapater de Madrid y el nacimiento de mi tercer hijo. Es de naturaleza secundaria podriamos decir, ya que no está escrita propiamente por mí, pero si es de mi entorno cercano, ya que yo era el destinatario de estas palabras.
Cartas a otros destinatarios
Sobre las cartas escritas a otros destinatarios destaco esta escrita a Joaquina Alduy el 6 de julio de 1781, en la que se cuenta la llegada a Madrid con mi familia tras la estancia en
Zaragoza. El reclamo de esta visita era el contratado para pintar el tema Regina Martyrum en la cúpula de la basílica del Pilar.
Comentarios a los Caprichos
En referencia a mis últimos documentos, los comentarios a los caprichos, definiré primero a "Los caprichos", como una serie de 80 grabados que datan entre (1797-1798) y que cuentan con una naturaleza primaria como se diría hoy en día, ya que estan escritos personal y unicamnete por mi.
En ellos ejemplifico un mundo en crisis, entendida esta idea en el sentido de cambio. Conceptualmente revelan las fisuras de una estructura sociopolítica basada en una anquilosada estratificación estamental, y de un sistema de valores fundamentado en el inmovilismo de las costumbres y la tiránica opresión religiosa de las conciencias.Es decir una sátira social de finales del siglo XVIII, en la que destacaban nobleza y clero.
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Un grupo que se desarrolla paralelo al de las brujas es el de los duendes. La creencia en duendes era una superstición menor, que no inspiraba terror y se les veía de forma familiar, festiva y burlona. Además en la segunda mitad del siglo XVIII la palabra duende significaba a menudo fraile, ello explica que los duendes según mi punto de vista vayan vestidos con hábitos religiosos. Y los interpreto como personajes inofensivos. Pero conforme avanzan las láminas estos se van transformando en seres siniestros cuyas actividades no tiene nada de inofensivas. Según los manuscritos de Ayala y de la Biblioteca Nacional que interpretan los Caprichos, dicen que mi intención sería señalar que los verdaderos duendes son los curas y frailes que comen y beben a costa nuestra y que tienen la mano larga para coger. La verdad es que no van demasiado desencaminados a lo que con mis trazos queria retratar.
Y los comentarios, son los escritos que hacía en cada obra, que los comentaba y daba a entender el significado oculto de cada uno. Estos escritos son de naturaleza primaria y datan de 1800.
Además de estos también realicé "Los desastres" obras de naturaleza primaria en las
que generalmente se ven afectadas por mi estancia en Zaragoza durante la Guerra de la Independencia, representadas como una profunda huella que me afectó al enfrentarme directamente con las terribles consecuencias de esa lucha cruel, que en su extensión durante cinco largos años habría de convertirse en una de las matanzas más atroces conocidas en el continente.
ej:
"Con razon ó sin ella"ENLACES:
https://www.museodelprado.es/goya-en-el-prado/
http://goya.unizar.es/InfoGoya/Sobre/DocumentosHistoricos.html
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